Saludos, viajer@s. Esta semana se ha montado un buen jaleo en las redes. Un youtuber, JPelirrojo, uno de los más antiguos dentro de la comunidad YouTube España, les ha dicho a sus seguidores, entre otras cosas, que se aparten de la educación reglada para ser felices. Ya se ha hablado largo y tendido sobre este tema, por lo que voy a incidir brevemente sobre lo que me parece más relevante.
Es cierto que el sistema educativo español deja mucho que desear. Estudiar a día de hoy no es garantía de tener un trabajo acorde con los estudios realizados, ni tan siquiera si tus estudios son universitarios. Lo siento, es así, en un país con una tasa de paro en torno al 15% de la población activa y donde las universidades no se preocupan de colocarte en el mercado, no hay trabajo para todos. Ello por no hablar lo elitistas y clientelares que se han vuelto muchos puestos de trabajo.
No obstante, pese a que el sistema sea decadente, estudiar te facilita la inserción laboral, pues si siendo graduado o licenciado es complejo encontrar trabajo, no te quiero contar lo que ocurre si no tienes ningún estudio. Además, los puestos de trabajo de baja cualificación son una puerta abierta a trabajos ridículamente remunerados a cambio de excesivas horas de esfuerzo.
Por otro lado, es un equívoco absoluto pensar que estudiamos únicamente para trabajar y ganarnos la vida. Algunos diréis que soy un romántico, pero estudiar te sirve para mucho más. Cuando estudias tu mente se expande, aprendes cosas más o menos útiles y, a lo largo de tu vida, notarás que esa amplitud de miras es muy necesaria para evitar que te engañen o te manipulen.
Recordad, vivimos en la era de las redes sociales y de la manipulación más absoluta. El mercado ha cambiado las reglas del juego, pues se ha dado cuenta de que es sencillo hacerse rico engañando a los demás. Nuevas necesidades, cursos que no necesitas, teléfonos con sobreprecio, compañías de suministro acosadoras, son un ejemplo de las balas que debemos esquivar diariamente. Y créeme, cuanto más te formas, más consciente eres de toda la negrura que te rodea.
Como consumidores, tenemos que tener cuidado de a qué "influencer" seguimos, pues no todos los mensajes son válidos o no a todos nos pueden funcionar. Además, ten presente que muchos de esos "influencer" tiene intenciones en sus discursos, que a día de hoy suelen ser: vender cursos, vender libros o vender productos (videojuegos, cosméticos, productos deportivos etc.) No hay nada de ilícito en que nos quieran vender cosas, ahora bien, tenemos que ser lo suficientemente listos para darnos cuenta de cuando nos están engañando o utilizando.
¡Hasta la próxima!
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